Nos han preguntado varias veces si ha valido la pena apuntarse al Social Media Camp. Que si en sólo 5 días se podía hacer algo y qué es lo que íbamos a aprender. Y la verdad es que mucho, pero hay 5 motivos principales para asistir. Y no son poca cosa…

Nuestros clientes se merecem que nuestro equipo aproveche todas las oportunidades que pueda de crecer, de aprender y de transmitir sus conocimientos para que podamos dar un mejor servicio. «No hay expertos REALES en Redes Sociales ya que estas cambian todos los días» (Palabras de Amel Fernández al presentar el curso) Así que será mejor que aprovechemos cada oportunidad para aprender y para crecer, porque estos conocimientos adquiridos por nosotros serán disfrutados por nuestros clientes.

Aunque ellos se llaman a sí mismos «monitores» son unos profesionales increíbles, totalmente reconocidos en las redes sociales y en el mundo profesional del social media. Sertxu Sánchez, Carmen Bejerano, el citado Amel Fernández, Albert Socorro, María Velasco, Jose Mª Jiménez… Todos nombres con peso en las redes sociales. Ya sean más conocidos por tí (o por mí ya puestos) o no su experiencia y Know-how está ahí, es medible y demostrable, como las redes sociales

¿Y porqué no? No he podido resistirme a incluirlo en los cinco motivos. Su precio es realmente bajo para la enorme calidad del curso. Más allá de calidades de aulas y conexiones o de un ordenador por persona en el curso han seguido el espíritu de practicidad que tanto gusta a los clientes de La Bola Ocho. Se han eliminado florituras y gastos superfluos y se han centrado en las necesidades de la audiencia. Un curso concentrado, sí, pero excelente, hasta ahora por lo menos, y adaptado a las necesidades de una quizá (y sólo quizá, ahora os explico) clase masificada.

Y es que probablemente esto sea lo mejor de todo. El número, que al principio puede resultar intimidante, se convierte en una ventaja. Han sabido dar con una de las claves de las Redes Sociales y adaptarlas al mundo real: convertir tus debilidades en fortalezas. La experiencia y los diferentes campos en los que se mueven estos «campers», que es como nos llamamos todos allí, es variadísima y enriquecedora. Todos los miembros se siguen entre ellos, se preguntan y responden, interactúan y forman una microcomunidad. Desde el primer momento has ganado seguidores de calidad, que valoran tus opiniones y retuitean tus posts, que comparten y se lo pasan bomba. Siempre aprendiendo los unos de los otros, virtual y personalmente. Toda una maravilla que seguro que trascenderá a esta cortísima semana.

¡Y así es! Te contagian entusiasmo y positividad, dos de las claves más importantes a tener en cuenta en la gestión de Redes Sociales. No queremos ser Community Managers, queremos gestionar nuestras páginas de manera que provoquen un WOW! una experiencia, un sentimiento. No vale la mediocridad, lo aburrido (que ya sabéis que es lo peor que se puede ser en este mundo si es que nos seguís) o lo habitual. Nos impregnamos del Flow de las clases y decidimos que cada una de las cosas sean WOW!. Esta filosofía nos va al dedillo a La Bola Ocho y esperamos poder reflejar todas nuestras experiencias en nuestros clientes. ¡Preparaos que ahora nos vais a seguir más que nunca!