Recopilando anuncios «vintage» que tanto nos gustan nos dimos cuenta de un detalle alucinante en este anuncio de Coca-cola.

El retoque fotográfico, aunque nos cueste mucho aceptarlo existía mucho antes de photoshop. De hecho la idea de su creador, Thomas Knoll, vino precisamente por esto, por el retoque fotográfico. Hoy el uso de este revolucionarios programa (otro día os contamos su historia) es a muchísimos niveles. No sólo diseñadores lo usan, sino que debido a su excelente interface y a sus casi infinitas posibilidades lo utilizan desde community managers hasta amas de casa.

Pero antes de la llegada de Photoshop (e incluso después) las fotografías eran retocadas con pinceles, insoladoras e incluso manipulando directamente las diapositivas. Cabe decir que este trabajo era terriblemente laborioso y sólo hecho por especialistas a los que sólo las grandes agencias podían acceder. La publicidad conocía la «subliminalidad» desde sus orígenes y fue utilizada con más o menos éxito en algunos de sus retoques. Es famosa la foto de la botella de ginebra en la que en el vaso se puede leer la palabra «SEX» escrita en sus hielos, aunque el uso y el funcionamiento de estos mensajes es bastante discutible.

Subliminal o no nosotros hemos descubierto en este anuncio de Coca-cola el número 84 en sus hielos. Al principio pensábamos que se trataba de una paraidolia (reconstrucción mental de formas abstractas en figurativas, muy popularizada por Carmen Porter en Cuarto Milenio) pero al leer el texto del print nos dimos cuenta de que el mensaje habla de Coca-cola durante 84 años. Demasiada coincidencia para una fotografía que se estudiaba en aquella época por varios pares de ojos.