Imagen tipos encantadores Adrian Frutiger II

Imagen Adrián Frutiger la bola ocho

Como decíamos en nuestra anterior entrada, puede que Adrian Frutiger sea el tipógrafo más reconocido del siglo XX, pocos como él, pueden presumir de tener tantas y tan buenas creaciones en su currículo. Hoy vamos a conocer un poco más a fondo la “Frutiger” la tipografía que toma su apellido como referencia y que fue creada mejorando la legibilidad de su gran tipografía anterior, la Univers.

En 1968 Adrian recibió el encargo de realizar la señalización del nuevo aeropuerto parisino, el Charles de Gaulle, bajo una premisa, su legibilidad. Los viajeros debían de poder ver razonablemente bien las señales y su contenido mientras se desplazaban de un lado a otro. Para ello pensó en utilizar un tipo de palo seco y claro, habiendo creado la Univers, cualquiera la hubiera empleado para ello, pero Adrian fue más allá. Hizo una crítica constructiva sobre su propio trabajo y llegó a la conclusión de que esta presentaba unas terminaciones muy redondeadas, que si bien le daban un toque armonioso en decoración, no facilitaban la lectura rápida a grandes distancias. En 1974, la señalética del Charles de Gaulle, estaba rotulada con la nueva tipografía. Un par de años más tarde, en 1976 se presentó al público y en 1978, con su adquisición por parte de Linotype, comenzó su popularización. Y es que, con esta letra, consiguió algo que todos buscan, que sea perfecta para casi, casi, cualquier uso, funcionando igual de bien en carteles con caracteres enormes, como en inmensos bloques de texto.

Hoy en día es muy común verla en las señales que pueblan las autovías y autopistas españolas y europeas (incluyendo Francia, Italia y Alemania). Suiza cuenta con una versión propia en sus carreteras desde el año 2003, la Astra Frutiger, que nació del encargo de la entidad de carreteras suiza y que incrementa, aún más, la legibilidad.

En los años ochenta comienza a escribir libros y nos deja algunos tan valiosos como “Signos, símbolos, marcas, señales.” (Gustavo Gili, 1985/2011) o “The development of western type carved in wood plates.” (1999, sin edición en España). Y en 1994, decide volver a Suiza y establecer allí su residencia, aunque manteniendo abierto su estudio de París, cerrando una etapa, pero abriendo una nueva, sorprendentemente, en alguien que cuenta entonces con 66 años.

En seis décadas de actividad ha creado más de 30 tipografías como la Univers, la Frutiger, la President, la OCR, la Avenir o la Serifa, muchas de ellas siguen de plena vigencia. Un trabajador incansable y ejemplo a seguir. Esperamos que el próximo 24 de marzo celebre su cumpleaños una vez más.

Gracias, Maestro.